Este rincón fueron los seis metros a los que regresamos más veces. Una y otra vez, una y otra vez.
charlamos largamente con el expositor acerca de su forma de trabajar y crear esas increíbles piezas que veis ahí . Una locura, un trabajo y una visión extraordinaria.
¡ Madre mía del amor hermoso, que pasada...y encima los venden ! ¡ Buffff, esto es otra dimensión !
ResponderEliminarUn abrazo
Asi es Juan. Es otro mundo
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